sábado, 1 de junio de 2024

Pequeño atlas forestal del municipio de Huérmeces

 

A pesar de su contenida extensión (algo menos de 49 km2), el municipio de Huérmeces mantiene importantes masas forestales. Tanto es así, que la sexta parte del territorio municipal (17%) tiene la catalogación de "forestal".



Es cierto que existe una considerable diferencia entre los cuatro términos que conforman el municipio, siendo Ruyales del Páramo el menos forestal (solo el 5% de su término) y Quintanilla Pedro Abarca el más boscoso (25%), quedando en un nivel inferior San Pantaleón del Páramo (23%) y Huérmeces (18%). En general, las principales masas forestales se ubican en los extremos norte y nordeste del municipio.


Encina (Q. ilex) en plena floración

Hojas recién brotadas de quejigo (Q. faginea)

Hojas de quejigo (Q. faginea)

Gallarones sobre quejigo (Q. faginea)


En el territorio municipal son cinco las especies forestales que llegan a conformar bosques o masas forestales más o menos densas, más o menos puras:

  • Encina (Quercus ilex, Quercus rotundifolia), también denominada carrasca
  • Quejigo (Quercus faginea, Quercus lusitanica), también denominado roble encina o roble carrasqueño
  • Rebollo (Quercus pyrenaica, Quercus toza), también denominado melojo
  • Pino albar (Pinus sylvestris)
  • Chopo (Populus alba)

Hojas maduras de rebollo (Q. pyrenaica)

Hojas recién brotadas de rebollo (Q. pyrenaica)

Hojas de rebollo



Aunque hay que matizar que tanto las masas forestales de pino albar como las de chopo tienen la condición de artificiales, plantadas por el hombre: los pinares, en la década de los cincuenta; los chopos, en décadas más recientes. Por ello, podemos afirmar que los bosques naturales del municipio siempre han sido encinares y robledales, así como los bosquetes de galería que se establecían en las riberas del Úrbel y arroyos tributarios.




En cuanto a la distribución del territorio forestal por especies, observamos que el encinar es el tipo de bosque más abundante en el municipio (53% de la superficie forestal), seguido del pinar de repoblación (21%), quejigar (20%) y rebollar (5%). Las plantaciones de chopo resultan testimoniales.

Cabe añadir que en el año 2006 se realizaron importantes plantaciones de pino en diversos parajes del término municipal de Huérmeces, por lo que en un futuro (si la procesionaria y el cambio climático lo permiten) quizás haya que incrementar la superficie forestal dedicada a pinar.


Mapa del II Inventario Forestal Nacional (1986-1995): azul (encinar), naranja (pinar), rosa (quejigar y rebollar); SPP (Pantaleón), QPA (Quintanilla), Ruy (Ruyales), Hces (Huérmeces)


Simplificando mucho, podríamos considerar que Huérmeces es el pueblo de los encinares (carrascales), Ruyales el de los pinares, Quintanilla el de los rebollares y San Pantaleón el de los quejigares.    


PRINCIPALES MASAS FORESTALES DEL MUNICIPIO:


1. HUÉRMECES

Las principales masas forestales existentes en el término consisten en cinco grandes encinares y tres pinares de repoblación. Los encinares ocupan los terrenos rocosos correspondientes a las elevaciones situadas al norte y al este del término; los pinares, por su parte, ocupan los terrenos arcillosos de un vallejo (Valmares), un extenso aunque poco elevado cotorro (Navas) y parte de una amplia paramera (El Páramo), situados al norte, este y oeste del término, respectivamente.

También existen tres pequeñas manchas de quejigares en Valdetope, Navatillo y Los Cotorros. En Huérmeces no existen masas forestales a base de rebollos (Quercus pyrenaica), medrando únicamente algún ejemplar aislado, intercalado en quejigares, y algún brote reciente en los alrededores de Los Casares.

  • 1.1 Encinares de Monte las Eras, Valdevacas y Valdecofrades (160 ha): constituye la principal masa forestal de todo el municipio de Huérmeces; a pesar de haber sufrido dos cercenamientos: el producido por el trazado del gasoducto Burgos-Santander-Asturias (1989) y el más grave, el ocasionado por el trazado del tramo Ubierna-Montorio de la autovía de Burgos a Aguilar (2024). Esta masa forestal tiene continuidad hacia el este a través del Monte de San Martín (80 ha), ya en el término de Ubierna. Estos encinares se desarrollan sobre terrenos calizos del Cretácico Superior.

Sigpac (8 agosto 2023)

Monte las Eras desde el camino de Valdevacas

Monte las Eras desde la laguna de Valdevacas


  • 1.2 Encinares de Rallastra (63 ha): la segunda masa forestal en extensión, ocupa toda la zona elevada delimitada por La Veguilla-Los Cotorros al norte, el desfiladero del Úrbel al este, Valdetope y Prao los Mulos al sur y La Lastra de San Pantaleón al oeste. Además de por su extensión, algunas zonas de este encinar destacan por la densidad de las matas. Al igual que los anteriores, estos encinares se desarrollan sobre terrenos calizos del Cretácico Superior.

Sigpac (24 junio 2009)

Encinares de Rallastra y quejigares de Los Cotorros


  • 1.3 Encinares de Cuesta el Cuerno, Buen Tudanca y Lagunilla (50 ha): estas masas forestales presentan una menor continuidad y densidad que las dos anteriores, aunque ocupan terrenos de singular encanto, como es el caso del retorcido y pindio vallejo de Buen Tudanca. Terrenos calizos del Cretácico Superior.

Sigpac (8 agosto 2023)

Buen Tudanca, a la altura del camino de La Varga


  • 1.4 Encinares de Itero, Valdegoba e Isilla (46 has): aunque bien podrían considerarse dos masas separadas por el vallejo de Valdegoba; al norte, los encinares de Itero (15 ha) y al sur, los de Valdegoba-Isilla (31 ha). Terrenos calizos del Cretácico Superior.

Sigpac, 8 de agosto de 2023

Encinar de Valdegoba


 
  • 1.5 Encinares de San Vicente, El Calero y Valdefrailes (43 ha): esta importante masa forestal también sufrió un cercenamiento, en este caso ejecutado a principios de la década de los años setenta al levantarse allí una base militar de comunicaciones, que afectó a unas 4 ha de buen encinar. Muchos años antes, en los tiempos del Bronce Final o de la Primera Edad del Hierro, puede que se produjera la total desforestación de la submeseta sur de San Vicente (6 ha), al levantarse allí un asentamiento castreño. Tras el despoblamiento del lugar, la presión ganadera evitaría la regeneración natural de la encina.

Sigpac (24 junio 2009)

 
  • 1.6 Pinar de Navas (47 ha): el pinar más extenso del municipio, plantado a mano en los años cincuenta del siglo pasado. Esta plantación, de densidad rala, quizás sea una de las más exitosas de las entonces ejecutadas. El cotorro de Navas era un terreno arcilloso, de nulo valor agronómico y escaso encanto paisajístico. Hoy en día, constituye una isla de sombra y una reserva micológica. Este pinar se asienta sobre arcillas rojas marginales de la "Facies Bureba" (Paleogeno-Mioceno Inferior).

El extenso pinar de Navas, en la raya con Castrillo de Rucios (Sigpac, 8 agosto 2023)

Pinar de Navas  desde el camino de Palillos


  • 1.7 Pinar de Valmares (15 ha): pinar que presenta una densidad muy desigual, debido a la heterogeneidad de los terrenos que constituyen el vallejo homónimo, alternando zonas arcillosas con otras de conglomerados. Al igual que el de Navas, este pinar se asienta sobre terrenos marginales de la "Facies Bureba" (Paleogeno-Mioceno Inferior). 

Pinar de Valmares, con la vieja carretera de Burgos a Aguilar al fondo, a la derecha
 
  • 1.8 Pinares del Páramo (16 ha): consisten en tres manchas casi contiguas, de las que la de mayor extensión (10 ha) es situada más al sur; las manchas 2 y 3 limitan con el término de Ros y la zona meridional de esta última limita con el término de Santibáñez. Estos pinares se asientan sobre terrenos calizos del "Páramo Inferior" (Mioceno Superior)

Pinares del Páramo (Sigpac, 8 agosto 2023)


  • 1.9 Quejigares de Valcavado y Navatillo (20 ha): desarrollados sobre las fuertes pendientes que caen hacia el Úrbel desde las alturas de Valcavado; un quejigo centenario es el roble que hace las veces de mojón (trifinio) entre los términos de Montorio, San Pantaleón y Huérmeces.

El viejo Roble, en el quejigar que cae hacia Los Navatillos desde las alturas de Valcavado


  • 1.10 Quejigares de Los Cotorros (17 ha): estos pequeños bosquetes mixtos de quejigo y encina quizás constituyan la masa forestal menos conocida de Huérmeces (lo mismo sucede con su prolongación por el término vecino de San Pantaleón); su ubicación, lejos de toda ruta frecuentada, los convierten en lugares siempre solitarios, para deleite de flora y fauna del lugar; además, se desarrollan sobre terrenos calizos del Triásico, los más antiguos del término de Huérmeces (más de 200 millones de años han pasado desde su formación). En la confluencia con las laderas que desciende desde Rallastra se encuentra un singular paraje, en forma de corto pero profundo vallejo: Ontiniel (Hontiniel, Ontiñel).

Los Cotorros, desde la carretera de La Veguilla


Bosque mixto de quejigo y encina en Los Cotorros

Quejigares de Los Cotorros, vistos desde las laderas de Rallastra


  • 1.11 Quejigares de Valdetope (3 ha): pequeños bosquetes situados a ambos lados del camino que recorre longitudinalmente todo el vallejo; encontraremos quejigos tanto en las laderas norte del vallejo (las que caen desde Rallastra) como en las laderas del sur (las que caen desde San Vicente); se trata de bosquetes poco densos, desarrollados sobre terrenos de fuerte pendiente, en los que también aparecen abundantes ejemplares de encina.

Quejigar de Valdetope, con encinas dispersas

Quejigar de Valdetope, entre los encinares de San Vicente y Rallastra; desde el mirador de Valdegoba

  • 1.12 Choperas de Buzón, Valdegoba, Valdefrailes, Alba, Navatillo y La Veguilla (5 ha): se trata de plantaciones realizadas en los años sesenta y setenta del siglo pasado; la chopera más joven es la de La Veguilla, plantada a principios de los ochenta.

Chopera de Valdegoba

Chopera de La Veguilla, con el quejigar de Los Cotorros al fondo

Chopera de Buzón

Chopera de Alba


2. QUINTANILLA PEDRO ABARCA

El más forestado de los cuatro pueblos. En la zona de Robledillo y alrededores se pueden encontrar, en muy poco espacio, masas forestales a base de los tres principales Quercus de la comarca (Q. ilex en las alturas, Q. faginea en las laderas y Q. pyrenaica en el arenoso fondo del valle). También dispone de una importante masa de pinar contigua a Robledillo, y de otra mucho más pequeña en el límite con La Nuez de Arriba y San Pantaleón del Páramo.

  • 2.1 Rebollar de Robledillo (40 ha): sin duda, estamos ante el bosque con más encanto del municipio y quizás también de la comarca; aparte de la densa presencia de buenos ejemplares de rebollo, nos encontraremos con una ermita (Santa Isabel), una fuente de fresca agua (de estética mejorable, pero así se hacían las cosas en los años setenta), una sombreada campa a la que acudir en romería el primer domingo de julio, un pequeño y olvidado campo de fútbol (testigo de tiempos mejores, demográficamente hablando) y, por último, con la insoportable levedad de los mosquitos que, sobre todo en días estivales de mucho calor y poco viento, nos desesperarán con sus reiterados planeos. Nada es perfecto. La masa forestal conformada por el rebollar de Robledillo, los quejigares y encinares de la Pinza (que llegan hasta Úrbel), junto con los pinares de Quintanilla y Acedillo, constituyen la mayor extensión boscosa de la comarca, así como el territorio forestal de mayor valor ecológico de esta zona de la provincia de Burgos. Robledillo se desarrolla sobre terrenos arenosos del Cretácico Inferior (Aptiense).


Robledillo a mediados de mayo, cuando comienza la brotación del rebollo (satellites.pro)

Robledillo: rebollar, fuente y ermita

Robledillo: un bosque de roble melojo o rebollo (Quercus pyrenaica)

Robledillo en época estival
Campo de fútbol de Robledillo


  • 2.2 Quejigares de la ladera sur de La Pinza (50 ha): esta interesante masa forestal ocupa toda la ladera meridional de la enorme meseta caliza de La Pinza. Estos quejigos se desarrollan sobre terrenos arenosos de la "Facies Utrillas", Cretácico Inferior (Albiense); esta banda arenosa se extiende alrededor de toda la ladera sur de La Pinza-El Perul, penetrando en el término de Acedillo.

Banda arenosa ocupada por quejigares, justo debajo de los encinares de La Pinza (satellite.pro)

Quejigares en las laderas de La Pinza (Quintanilla Pedro Abarca); al fondo, El Perul

Quejigares en la ladera meridional de La Pinza


  • 2.3 Quejigares del Pontón y El Peñuco (10 ha): desarrollados sobre los terrenos del sector noroccidental del cinturón Trías-Lías originado por el diapiro de Valdepino; estamos, pues, ante los terrenos más antiguos del municipio (más de 200 millones de años), con abundancia de arcillas, dolomías y margas. En las zonas bajas de estos quejigares se intercalan numerosos ejemplares de rebollo.



Quejigares entre El Pontón y El Peñuco


  • 2.4 Rebollares de Molares (4 ha): más que de un rebollar puro se trata de un bosque mixto de rebollos y quejigos, aunque con cierto dominio de los primeros. Se desarrollan sobre terrenos calizos jurásicos, circundando las peñas calizas que sobresalen sobre el entorno. Las masas más densas se sitúan en la cara NW de las peñas; las situadas en la cara SE son poco densas y dispersas; los rebollos están rodeados de tierras de labor, limitadas por sendos caminos. En el extremo meridional de Molares se encuentra la fuente de la Canaleja.

Sigpac (8 agosto 2023)


Sector septentrional del rebollar de Molares

Sector meridional del rebollar de Molares


  • 2.5 Encinares de La Pinza (25 ha): comprenden únicamente el cuadrante SE de la enorme mole caliza, delimitada por el vial de servicio del parque eólico allí levantado. Estos encinares se desarrollan sobre terrenos calizos del Cretácico Superior (Coniacense-Turoniense) y presentan densidades muy variables, por la abundancia de afloramientos rocosos en forma de lastras.

Encinares de La Pinza vistos desde El Perul; los pertenecientes a QPA se sitúan al sur de la alineación de aerogeneradores


  • 2.6 Pinar de Valdechondo (32 ha): este pinar de Quintanilla forma parte de la extensa repoblación realizada en esta zona llana y arenosa, que se adentra en el término vecino de Acedillo. Estamos en terrenos del Cretácico Inferior (Aptiense), antiguamente dominados por extensos brezales.


Desde el Perul: pinares de Acedillo y Quintanilla Pedro Abarca; al fondo, quejigares y rebollar de Robledillo

Pinares que se extienden entre los términos de Quintanilla Pedro Abarca (izqda.) y Acedillo (dcha.) 


  • 2.7 Pinar de Sorredondo (6 ha): desarrollado en dos manchas diferenciadas, la norte (5 ha) mucho más extensa que la sur (1 ha); este denso pinar, que se despliega entre el socavado paraje de Sorredondo y las alturas de Trulla (con su parque eólico como testigo), ocupa terrenos potenciales de quejigar. Nos encontramos muy cerca del trifinio entre los términos de La Nuez de Arriba, Quintanilla Pedro Abarca y San Pantaleón del Páramo.

Sigpac (8 agosto 2023)

Pinar de Sorredondo (Quintanilla Pedro Abarca) desde Trulla

Pinar de Sorredondo (QPA) desde el camino de Quintanilla a La Nuez de Arriba




3. RUYALES DEL PÁRAMO

Aunque Ruyales resulta ser el menos forestado de los cuatro pueblos que conforman el municipio de Huérmeces, dispone de cinco importantes manchas de pinar, plantadas en los años cincuenta del pasado siglo, y ocupando una superficie total de 48 hectáreas.





En las alturas calizas de San Benito y Honquijosa medran pequeñas manchas de encina que, aunque no posean la densidad suficiente como para alcanzar la categoría de masa forestal, bien merecen una mención por su cierto interés biológico y paisajístico.


Encinas dispersas en las alturas de La Honquijosa (Ruyales del Páramo)


Las cinco masas de pinar de Ruyales son:

  • 3.1 Las Mayas (21 ha): inconfundible por su contorno hexagonal "apaisado", este denso pinar presenta una pequeña hendedura en su mitad meridional, correspondiente a la pequeña vaguada allí presente; muy cerca se encuentra La Laguna, un auténtico regalo primaveral para la avifauna de la comarca. 

El pinar de Las Mayas (Ruyales), con Las Peñucas (Quintanilla) debajo, desde La Lastra (Pantaleón)

  • 3.2 Ocejo (8 ha): pinar mucho mas ralo que su vecino de Las Mayas, sin duda debido a la inferior calidad de los terrenos sobre los que se desarrolla; se encuentra en el lateral occidental del camino que comunica Ruyales con Quintanilla.
  • 3.3 Valdaña (La Cotorra) (7 ha): son algún claro en su interior, este pinar se encuentra en el lateral oriental del camino que comunica Ruyales con Quintanilla a través del Ocejo y Valdementero.

Pinar de Valdaña o La Cotorra, con el camino de Ruyales a Quintanilla serpenteando


  • 3.4 Valdefrailes (7 ha): este pinar, cuyo nombre se repite en un paraje farol algo más extenso y oriental, presenta desde el espacio un contorno peculiar, fácilmente reconocible: una nítida forma de pez de acuario, quizás de ascendencia coralina; su densidad aparente también resulta inferior a la de su vecino de Las Mayas. 

Pinares de Valdefrailes y Las Mayas, desde el espacio (Sigpac, agosto 2023)

Arranque del vallejo de Valdefrailes (Ruyales) con el pinar homónimo al fondo, a la derecha


  • 3.5 Las Hoyas (5 ha): el más occidental de los cinco pinares de Ruyales, medra ya cerca de la raya con Bustillo del Páramo y Espinosilla de San Bartolomé (el trifinio se encuentra muy cerca del extremo SW del bosque); presenta abundantes claros en su interior, lo que le convierte en un pinar escasamente umbrío.

Pinar de Las Hoyas (Ruyales); al fondo, pinares de Bustillo y quejigares en la ladera de La Pinza (Quintanilla Pedro Abarca); fotografía desde el quejigar de La Frontera (Los Tremellos)
 


Estos cinco pinares se encuentran enclavados en la cabecera del río Ruyales, sobre materiales arcillosos y arenosos, de baja calidad agronómica, y potencialmente erosionables. Hasta hace pocos años, estos pinares disfrutaban del silencio y la quietud propia de parajes solitarios y a trasmano de todo; desgraciadamente, todo cambió desde que la fiebre micológica otoñal lo invadió todo. 


4. SAN PANTALEÓN DEL PÁRAMO

Aunque su extensión territorial resulta ser la más pequeño de los cuatro pueblos, San Pantaleón presenta importantes masas boscosas (el 23% de su término tiene la catalogación de forestal), sobre todo en cuanto a quejigares.

  • 4.1 Encinares de Valcavado y Trulla (50 ha): las alturas se encuentran dominadas por las encinas, mientras que las laderas que caen hacia el vallejo de Valcavado se puede considerar un bosque mixto de encinas.

Bosque mixto de encinas y quejigos en las alturas de Valcavado


  • 4.2 Quejigar de Romañero-Las Calanas (25 ha): situado en la ladera que desciende desde las alturas de Valcavado hacia La Veguilla; bien visible desde la carretera de La Bagoya a San Pantaleón. Se desarrollan, en fuerte pendiente, sobre terrenos calizos del Cretácico Superior (Cenomaniense-Turoniense).

Sector oriental de los quejigares de San Pantaleón, hacia La Bagoya

Sector occidental de los quejigares de San Pantaleón, hacia el pueblo (al fondo)

  • 4.3 Quejigares de Entre Oteros y Los Cotorros (25 ha): continuación de los quejigares de Los Cotorros (término de Huérmeces); son también bosques mixtos, con abundancia de encinas; su densidad es muy variable, con abundancia de claros; al igual que sus vecinos faroles, estos bosques de quejigo se desarrollan sobre terrenos calizos del Triásico.

Quejigar de Entre Oteros (San Pantaleón), uno de los que sobreviven en los cotorros no cultivados


  • 4.4 Quejigar de Valcavado-Los Avellanos (14 ha): medran en toda la ladera de Valcavado orientada al suroeste; en la zona baja abundan ejemplares de avellano, dispersos entre la pedregosa ladera. Nos encontramos en una zona de alto valor ecológico, frecuentada desde hace décadas por botánicos burgaleses y citada en multitud de catálogos y estudios florísticos.

Quejigar de Valcavado, en la zona inferior del vallejo, con abundancia de encinas


  • 4.5 Pinar de Valcavado-Peña Nariz (5 ha): alargada masa de pinar, situada al abrigo de las peñas que discurren entre Peña Nariz y Las Mesas, ya en la zona superior de Valcavado, justo en el límite con el término de Montorio.

Pinar de Peña Nariz, en la zona alta de Valcavado

El pinar de Peña Nariz, con una buena orla de majuelos en primer plano
  


BOSQUES DE GALERÍA

En las márgenes de los ríos Úrbel y San Pantaleón, así como en la mayor parte de  sus arroyos tributarios, encontramos densas masas arbóreas longitudinales, conformadas por chopos, fresnos, majuelos, sauces, salgueras, mimbreras y arces, principalmente. La importancia biológica y ecológica de dichas masas forestales no resulta en absoluto despreciable, aunque las consideraremos en otra ocasión, más que nada por no hacer inmanejable el tamaño de este post.


OTRAS ESPECIES ARBÓREAS

Por último, únicamente cabe mencionar a una serie de especies leñosas que aparecen como cortejo acompañante en bosques dominantes de encina, quejigo y rebollo: avellanos, arces, fresnos, cerezos silvestre y majuelos, entre otros muchos. 


ANEXOS

ALGUNAS MASAS FORESTALES EN OTROS MUNICIPIOS CERCANOS

1. Hayedos y bosques mixtos de hayas y robles:

Aunque se encuentren fuera del territorio que denomino "La Comarca", los incluyo en la relación de bosques destacados, por su relativa cercanía, ubicación en espléndidos parajes y carácter relicto.
  • Hayedo del Tozo (Prádanos y Hoyos)
  • Hayedos de Valdelucio (Corralejo, Solanas, Escuderos y Paúl)
  • Hayedo de Castrecías
  • Hayedos del Rudrón y del San Antón

2. Rebollares de Quercus pyrenaica
  • Rebollares de Quintanilla Sobresierra
  • Rebollares de Montorio
  • Rebollares del Tozo y Valdelucio

3. Quejigares de Quercus faginea
  • Quejigares de Bustillo y Acedillo
  • Los Avellanares (Gredilla la Polera): 20 ha
  • El Monte (Peñahorada): 70 ha
  • Monasteruelo (Ros)
  • Espinosilla de San Bartolomé (Las Hormazas): 110 ha
  • El Robledal (Castrillo de Rucios): 60 has
  • El Somo-La Loma-La Carbonera (Castrillo de Rucios): 100 ha
  • El Monte (Lodoso): 43 ha
  • El Monte (Mansilla): 115 ha
  • El Monte (Marmellar de Arriba)
  • Páramo Corral y Los Casares (Marmellar de Arriba)
  • La Frontera (Los Tremellos): 90 ha
  • La Frontana y Cameras del Monte (Susinos del Páramo)
  • Monte Matapardo (Las Quintanillas): 145 ha
  • Monte El Calero (Tardajos)

4. Encinares de Quercus ilex
  • El Butrón (Icedo)
  • Encinares de Coculina
  • La Diusa y La Caldera (Bustillo del Páramo)
  • Las Mesas (Montorio)
  • Los Avellanares, El Val (Gredilla la Polera)
  • El Monte (Peñahorada)
  • Monteacedo (Ubierna)
  • Monte de San Martín (Ubierna)
  • Encinares de Castrillo de Rucios
  • El Monte (Cañizar de Argaño, Cítores del Páramo y Villanueva de Argaño)

5. Pinares de Pinus sylvestris
  • Pinares del entorno de La Mesa de Úrbel
  • Pinares de Masa
  • Pinares del Páramo de Masa
  • Pinares de Valdevacas y Valdeperal (San Martín de Ubierna)
  • Pinar de San Bartolomé (Las Hormazas): el más extenso de la comarca, con sus 115 ha, y su alargada planta (3 km de longitud y 300 m de anchura media)
  • Valmayor (Solano, Las Hormazas)
  • Pinares de Borcos (Las Hormazas)
  • Pinares de La Parte (Las Hormazas)
  • Las Erías (Pedrosa de Río Úrbel)
  • Pinares de Bustillo y Acedillo
  • San Roque (Sotragero)
  • Los Matorrales (Las Quintanillas): 73 ha

6. Choperas de Populus sp

Las mayores extensiones se localizan, sobre todo, en el curso bajo de los ríos Úrbel, Hormazuela, Ruyales. Por citar algunas:
  • Choperas de Úrbel del Castillo
  • Chopera de El Val (San Martín de Ubierna): 2 ha
  • Choperas de Sanguate (Los Tremellos): 3 ha
  • Espinosilla de San Bartolomé (Las Hormazas): 2 ha
  • Choperas de Sotobrín (Celadilla-Sotobrín)
  • Choperas de Rabé de las Calzadas
  • Choperas de Tardajos
  • Choperas de San Mamés de Burgos
  • Choperas de Frandovínez


UN SOLITARIO Y AISLADO BROTE DE REBOLLO EN LOS CASARES

Ya comenté que en el término de Huérmeces no existe, que uno sepa, ejemplar arbóreo alguno de roble melojo o rebollo (Quercus pyrenaica). Sin embargo, hace años encontré un solitario rebrote de rebollo en los alrededores del paraje denominado Los Casares, cerca ya de la raya con Castrillo de Rucios.





Los rebollos suelen medrar sobre suelos arenosos de carácter ácido, descalcificados, ricos en sílice. Los terrenos sobre los que intenta medrar este pequeño brote de melojo no reúnen, aparentemente, esas características edáficas, por lo que aún tendría más mérito su valiente intento por salir adelante.




Hace ya seis años que no paso por el enclave del melojo solitario. Ojalá que le hayan respetado los dientes de ovinos y corcinos. Este verano procuraré subir de nuevo a Los Casares y comprobar cómo le va la vida a este pionero, el único melojo de Huérmeces.


OTROS POSTS RELACIONADOS CON BOSQUES:







FUENTES

Segundo Inventario Forestal Nacional (1986-1995): Castilla y León - Burgos. Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, Publicaciones del ICONA. Madrid (1994)

Mapa de Cultivos y Aprovechamientos, Ministerio de Agricultura. Madrid (1978). Hoja 167 (Montorio)

Contribución al estudio florístico de las comarcas de La Lora y Páramo de Masa (Burgos). Pablo Galán Cela. Fontqueria, volumen XXX. Madrid (1990)

Visor SIGPAC v 4.15 (fotografía aérea para la provincia de Burgos: 8 agosto de 2023): las superficies forestales se han determinado -muy aproximadamente- a partir de las parcelas y recintos del SIGPAC, con pequeñas correcciones en cuanto a los usos  FO (Forestal) MT (Matorral) y PR (Pasto arbustivo)









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